| Los adolescentes ¿no tenemos derecho a ser tomados en cuenta? |
| Julieta Lenú, Gastón Rodríguez, Matías Benítez y Belén Saá |
Un proyecto de investigación de estudiantes de sexto año de Ingeniería y Medicina sobre el sistema quirúrgico Da Vinci se topó con varios inconvenientes. |
Somos estudiantes del liceo Francisco Bauzá que cursamos sexto año de Ingeniería y Medicina; al comienzo del año, en la materia estudios sociales y económicos nos vimos en la obligación de realizar un proyecto de investigación para eximir un curso. Nuestro proyecto en un comienzo se enfocó en la utilización de sistemas quirúrgicos en nuestro país, específicamente el sistema quirúrgico Da Vinci. Desde el comienzo tuvimos distintos fracasos, los cuales nos hicieron dar giros impensados en los objetivos y el enfoque de nuestro proyecto. La idea de investigar sobre el robot Da Vinci comenzó cuando nos enteramos de la problemática que hubo con el robot que se encuentra en cierta institución privada, ya que este fue utilizado sin la previa habilitación del Estado. Al comenzar a investigar descubrimos que ya había sido habilitado y se habían aclarado los inconvenientes. Por esta razón tuvimos que reformular los objetivos del proyecto, investigando si la adquisición de este nuevo sistema quirúrgico presentaba destacada efectividad en nuestro país, por ser un robot de alta tecnología. Asistimos a la institución privada donde se encuentra el robot Da Vinci, y al organismo del Estado que se ocupa de la habilitación de estos sistemas quirúrgicos, cuando entramos en el campo de investigación y recolección de datos, para recaudar datos económicos, jurídicos, resultados de operaciones anteriormente realizadas para la comparación con la cirugía convencional, la tasa de efectividad y de error en el robot. Tras numerosas asistencias a esta institución privada, la cual iba a ser la principal fuente de acceso a la información, tuvimos varios inconvenientes que llevarían luego al fracaso de nuestro proyecto. En nuestra primera asistencia fuimos atendidos amablemente y tras una corta espera fuimos recibidos por la secretaria general de dirección de la institución, quien nos pidió nuestros datos y el tema de nuestra visita para en un futuro coordinar una entrevista con alguna autoridad que nos pudiese brindar la información deseada. Luego de aproximadamente quince días recibimos un llamado de la secretaria, para coordinar una supuesta entrevista, quedó de llamarnos para concretar definitivamente dicha entrevista en la semana siguiente. Tras no recibir ningún llamado en la siguiente semana, decidimos volver a la institución para tener una charla con la secretaria para ver si personalmente podríamos coordinar la mencionada entrevista. Ese día la secretaria se encontraba en una reunión, lo cual imposibilitó la comunicación con ella. Ese mismo día, fuimos al organismo del Estado anteriormente mencionado para obtener datos acerca de los requisitos necesarios para la adquisición de un sistema quirúrgico en nuestro país, lo cual nos ayudaría para armar nuestro marco jurídico; como era de esperarse lamentablemente, no obtuvimos ninguna información debido a que el personal que nos atendió no estaba en contacto con el tema, ya que la funcionaria comenzó a trabajar en el mes de mayo, cuando la problemática con el robot ya había ocurrido y se había solucionado. Luego de insistir telefónicamente varias veces y nunca lograr contactar con alguien de mayor jerarquía que la secretaria, decidimos solicitar una carta a la dirección de nuestro liceo para poder presentarnos de una manera más formal. Tras obtener la carta, asistimos nuevamente para presentarla. La misma fue recibida, fotocopiada y posteriormente sellada por la secretaria. Como vimos que no obteníamos respuesta alguna, tratamos de buscar otra alternativa para obtener la información, la cual se estaba volviendo vital para nuestro proyecto, y decidimos redactar la entrevista que pensábamos realizar personalmente y enviarla por correo a la dirección de la institución privada. Llamamos directamente para hablar con la secretaria e informarle que habíamos enviado por mail las preguntas y nunca recibimos respuesta. A pesar de nuestra frustración y ver cómo el tiempo pasaba y no lográbamos avanzar, decidimos ir por última vez, y esta vez ni siquiera conseguimos hablar con la secretaria, ya que ésta se encontraba en su hora de descanso. Esperamos aproximadamente cuarenta y cinco minutos a que culminara su media hora de descanso y volvimos a insistir; nuevamente nos fue negado el acceso a comunicarnos con ella, lo cual resultó ser aún más frustrante para nosotros y fue ahí cuando tuvimos que darle un giro a nuestro proyecto, modificando los objetivos puesto que dicho proyecto fracasó. Lamentamos no haber podido acceder a la información, la cual posteriormente nos enteramos que no era pública, pero nunca nadie de estas instituciones nos advirtió siquiera que no nos podían brindar dicha información. Aun así, no pretendíamos acceder a historias clínicas ni a otro tipo de información que sí sabíamos que son confidenciales. Lo cual nos llevó a pensar por momentos ¿por ser estudiantes no merecemos ser atendidos y tenidos en cuenta? ¿Por qué no nos atienden siquiera para decirnos que no nos van a brindar ninguna información? Actualmente nuestro proyecto está enfocado a las cirugías robóticas realizadas por el robot Da Vinci y la efectividad que presenta frente a las cirugías tradicionales a nivel global; y las ventajas que presenta este tipo de cirugías frente a la laparoscopía. Nos parece de gran interés divulgar cierta información que recaudamos acerca de operaciones con tan sofisticados sistemas quirúrgicos, debido a que presentan grandes ventajas tanto para los pacientes como para los cirujanos. Entre ellas se encuentran: Facilita a los cirujanos a realizar sus operaciones ya que posee velocidad, fiabilidad, precisión y buena relación costo-rendimiento. No experimenta fatiga, cualquiera que sea la duración de la operación. No presenta temblor y es capaz de realizar su trabajo adecuadamente en la décima ó centésima operación, tal como en la primera. También se logran entre otras cosas que no existan desviaciones de la trayectoria planificada y alta seguridad con velocidades de ejecución y maniobras totalmente predecibles. Su capacidad de carga y repetitividad es comparativamente superior y su programación se ha facilitado considerablemente. Los robots están demostrando ser el aliado del cirujano, permitiéndole alcanzar objetivos jamás imaginados. Los robots pueden ser manipulados fácilmente. Su conexión con la computadora puede hacerse con un cable aéreo. La computadora, el robot y el medio ambiente están en la misma mesa, cerca del usuario para facilitarle el trabajo. Una particularidad es que permite visión en HD y 3D (alta definición y tridimensional) y multiplica por doce la visión del espacio a operar (campo quirúrgico). Técnicamente tiene muchas características interesantes, al robot básico se le pueden agregar muchas extensiones, como por ejemplo, cámaras de video para el reconocimiento de imágenes o un brazo mecánico con dos grados de libertad para poder tomar y manipular una infinidad de objetos. Facilita las intervenciones no masivas, incluso en lugares de difícil acceso. A diferencia de algunos otros robots, no genera desempleo ya que éste requiere el control y la supervisión de profesionales previamente capacitados para dicha manipulación. |
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