Las cosas por su nombre: Culpa.

«Una Hormiga Colorada Más»

 

Desde que comenzamos a escribir en este espacio, tan gentilmente cedido por el Sr. Director, hemos recurrido al «mataburros» (expresión acuñada por maestros con cierta antigüedad en el cargo al hacer alusión al diccionario) para referirnos al tema de turno con la propiedad y seriedad que el mismo merece.

El diccionario de la Real Academia Española define culpa como «imputación a alguien de una determinada acción como consecuencia de su conducta», «omisión de la diligencia exigible a alguien» o «acción u omisión que provoca un sentimiento de responsabilidad por un daño causado». En el mismo diccionario se define responsabilidad como «deuda, obligación de reparar y satisfacer, por sí o por otra persona, a consecuencia de un delito, de una culpa o de otra causa legal»; «cargo u obligación moral que resulta para alguien del posible yerro en cosa o asunto determinado».

De lo antedicho se infiere que cuando por acción u omisión provocamos un daño, somos pasibles de ser imputados como culpables. El culpable siempre es responsable, mientras que el responsable no siempre es culpable.

Tal el caso de un jerarca cuando un subordinado comete un delito. El jerarca no es culpable pues no es directamente el autor material del mismo pero le cabe responsabilidad, ya sea por desconocer o por permitir que dicho delito se llevara a cabo, generando una responsabilidad legal frente a la justicia o responsabilidad moral frente a la sociedad civil en la que vive.

Flaco favor le hace la justicia a nuestra sociedad, que de por sí tiene enormes dificultades para mantener el equilibrio sumamente inestable en el que se mueve, cuando exonera de toda responsabilidad a tres jerarcas municipales involucrados en una investigación realizada sobre uno de sus jerarcas subalternos, quien finalmente fuera procesado y encarcelado por delitos cometidos en el ejercicio de sus funciones.
El mensaje que la justicia envía a la ciudadanía ante hechos como el presente es que «aunque el agua sucia te salpique, tú no serás ensuciado». Milagros de la naturaleza, que le dicen.

 
 
Al principio de la página
Todos los artículos

 

Otros artículos en la edición febrero 2012
 
Editorial febrero 2012
Liber Trindade
 
¡En Uruguay sólo multas!
Marcelo Caporale
 
Con qué poco se cambia
Nicolás Berretta
 
Para ellos también hubo día de Reyes
Hipólito Furtado
 
Nota de tapa: Mal rayada
Liber Trindade
 
Huerta orgánica en el hospital Dr. Luis Piñeyro del Campo: el valor supremo de la vida

Ruben Jorge Castro Latorre

 
Abuelo
Lucía Croubalian
 
William Valdes
Cinthya Trindade
 
Intentando lograr un sueño: Demi Lovato en Uruguay

Melissa Trindade

 
Aguinaldo a los pasivos
Jorge Macera Perrone
 
Servicios higiénicos
Liber Trindade
 
¡Van por el Guinness! La camiseta más grande del mundo, la celeste
Marcelo Caporale
 
La UTAA ayer y hoy

José Píriz

 
Mi regalo de Reyes

Ionatan Was

 
Saber defenderse frente a la Administración

Edil departamental de Montevideo Dr. Martín Bueno

 
¿Hacia dónde vamos?

Ramiro Gómez

 
Trabajo a los catorce años

Liber Trindade

 
Volver al país

Liber Trindade

 
 
Todos los artículos

 

 

Archivo | Artículos | Lectores | Créditos
Las imágenes y opiniones vertidas en los artículos y espacios contratados son de exclusiva responsabilidad de sus autores
© 2012 Al día