| Otro ataque al artista nacional |
| Fernando Pazos Rosado |
Argentina comenzó a aplicar una visa a los artistas uruguayos que se presenten en ese país. |
Esta vez, desde la «hermana» República Argentina... Al levantarnos hoy lunes, nos desayunamos todos los uruguayos con una nueva medida de ataque al artista uruguayo. Una medida que perjudica a un sector de nuestros compatriotas, un grupo que en un número no menor acude a trabajar a la otra orilla. Los artistas... Esta visa de trabajo artística, es una clara medida discriminatoria, con los artistas extranjeros, pero al ver que Brasil no está incluido, nos deja ver más claramente que es contra los oriundos de nuestro país, ya que es el único que por su pequeño mercado obliga a los artistas de primer nivel a tener que viajar sí o sí a la República Argentina a trabajar, ya que allí el artista encuentra un mercado más formado, con mayor competencia y por ende mejor pago donde puede desarrollarse al máximo... La visa cuesta 100 dólares y dura solo un mes, e incluye a los artistas (vocalistas, músicos, actores, bailarines, etc.), pero también a los integrantes del equipo técnico y dirección artística. Este costo hace claramente inviable la realización de muchos espectáculos menores y ni que hablar en el caso de muchos grupos (tríos, cuartetos, quintetos o sextetos) y cantantes que viajan a hacer no grandes escenarios sino para hacer uno o dos boliches, les encarece su canon de forma exponencial y lo hace inviable para obtener posibles contratos de actuación. En Cuba, una visa artística cuesta U$S 60 y dura diez años, en Estados Unidos, la visa sale U$S 100 y dura también diez años. Lo peor de todo es que cuando escuchamos la noticia, nos ponemos a pensar qué está pasando y teniendo en cuenta lo que son las constantes medidas del Gobierno K, es difícil no pensar que se trate de otro ataque a nuestro país, esta vez, mediante el golpe directo a un sector minoritario en muchos aspectos, pero que necesita de ese mercado para subsistir, ya que nuestro mercado no da mucha chance para el desarrollo integral del artista, en cualquiera de sus ramas. Mercosur Cultural, le llamaban Por eso, al llegar la medianoche y ver el informativo, nos preocupamos aún más. Notamos que esta medida que se descubrió en la madrugada de ayer no había generado una reacción clara de nuestro Gobierno, únicamente un tibio comunicado de prensa que dice que el ministro Ehrlich estaba preocupado y que estaría «coordinando» los pasos a seguir con cancillería. Qué se deja en claro con esto, que no tiene una política clara de apoyo a nuestro artista nacional, que no ha tenido una decisión política clara en apoyo al rubro, y que ha dejado pasar las más importantes medidas de apoyo a estos orientales. Un ejemplo claro de ello es la no reglamentación aún de la jubilación del artista nacional. También nos preocupa que no haya grandes medidas ni grandes reclamos de las agremiaciones, aunque esto seguramente es producto de que la falta de apoyo constante desde las distintas aristas de nuestro medio es cada vez mayor y eso está claro que desalienta a su organización y su expresión. El artista uruguayo tiene claro que no será fácil trabajar aquí, sabe también que si quiere un verdadero desarrollo de su faceta y su nivel, deberá partir a la otra orilla del Río de la Plata, y que allí le costará muchísimo más que a un oriundo obtener un reconocimiento, porque lamentablemente siendo extranjero, las puertas no se abren tan fácil, menos en la Argentina, donde se han preocupado desde su propio gobierno de cercenar a más no poder cada oportunidad que se les presenta. Por eso debemos buscar dar una solución al tema, debemos levantar nuestra voz para que el Estado y las organizaciones de los artistas de nivel nacional y regional tercien, intercedan y obren en la búsqueda de una solución que ayude a nuestros artistas a poder seguir viajando y trabajar a otros países, porque si nos cerramos con el primer país que nos pone una traba, detrás vendrán otros y nada podremos decirles, pues ya les hemos dejado a los argentinos hacer lo mismo. Pero además debemos bregar porque nuestro país, nuestras autoridades culturales y educativas, cambien su accionar, y empiecen a pensar de una vez en el artista nacional y su obra como un todo, como un arista de importancia en nuestro desarrollo futuro, ya que cuando un artista viaja al extranjero se transforma en un embajador de nuestra cultura y nos pone en boca de al menos un porcentaje de la sociedad mundial, por pequeño que este sea... Estas cosas no pueden quedar en nada, estas decisiones son de carácter político y de verdad, si nos olvidamos del artista, nos olvidamos de la cultura y por ende nos olvidamos de nuestro pasado y borramos nuestro futuro... || |
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